Lejos quedaron esos tiempos donde los hombres no se preocupaban por su apariencia personal. La estética masculina se ha visto reivindicada en los últimos años desde que el cuidado de la barba y el cabello han tomado protagonismo gracias a la tendencia metrosexual que últimamente adoptan futbolistas y figuras públicas. Ahora son infinitas las opciones para consentirlos: tratamientos de depilación, cuidado de la piel, pedicuría y masajes son sólo algunas de las herramientas de cuidado personal en las que cada vez más hombres confían.
Sin embargo aún existen tabúes alrededor de la manicura, un tratamiento que se solía asociar, casi de forma exclusiva, al género femenino.
La manicura masculina existe, es un hecho. Su repentina aparición y rápida propagación nos indica que llegó para quedarse. Recordemos que las manos son la carta de presentación de ellos, pues
están siempre a la vista.
Cada vez más hombres comprenden que este tratamiento es importante tanto por motivos de salud como por motivos estéticos, ambos por igual. Tener unas manos saludables pertenecen a alguien que se cuida y se preocupa por su higiene y por la imagen que proyecta.
De hecho, cada vez son más los establecimientos que incluyen las rutinas de cuidado para hombres dentro de los tratamientos que ofrecen, e incluso se está apostando a la apertura de salones únicamente masculinos.
No es posible llevar un look en el que se cuide hasta el último detalle (barba, cabello, ropa, zapatos) si lo primero que mostramos al tratar con alguien, que son las manos, están descuidadas. Recuerden, chicos, las manos ásperas y callosas ya no son sinónimo de virilidad.
Una buena manicura masculina debe dejar las uñas cortas, limpias y prolijas, las cutículas repujadas (y cortadas, si así se desea). Se debe realizar también una exfoliación para retirar las células muertas, los callos y la resequedad provocados por el trabajo forzoso, el deporte o las condiciones climáticas, al tiempo que se realiza un masaje de manos para relajar esa musculatura que está en constante
movimiento.
Al final, es de suma importancia culminar con un tratamiento de hidratación, como aceite de queratina o parafina, para lograr uñas y piel suaves y tersas, en textura y en aspecto. Los expertos coinciden en que los hombres requieren de mucha más hidratación en manos y uñas, en comparación con las mujeres, y consideran conveniente someterse al tratamiento cada 15 días.
Si eres mujer ¡corre la voz!. Y si eres hombre, anímate a hacer un cambio por vos, no esperes más.
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